No es una peli pochoclera más.

Doy por inaugurado el blog, y que mejor que abrir con una por la cual discrepo con la de las personas que la vieron.

Esta película es, ni mas ni menos, que 2012, la ultima creación del querido y odiado, Roland Emmerich.
De este director, que produjo y dirigió varios tanques, como El día de la Independencia, Godzilla, 10.000 AC o El día después del mañana; uno espera obtener mas de lo mismo cuando se dispone a ver 2012, pero a medida que va transcurriendo la película vemos que Roland, después de muchos intentos, aprendió a filmar.
Se toma el tiempo necesario como para generar expectativa. Introduce varios personajes, con los cuales nos podemos identificar...el ruso, los 2 músicos y el hippie hacen que la película sea más terrenal, algo muy valorado en un film que usa en demasía la tecnología. Y hablando de tecnología, tanto la composición digital, como el uso de cámaras "especiales" y grúas, están al servicio de la película y por sobre toda las cosas, se entiende su utilización (cosa que no sucede en Transformes, por ejemplo, que no se entiende que es lo que esta pasando).
Con el broche de un montaje inteligente, 2012 nos hace olvidar de los pochoclos que habíamos comprado, que tanto ruido hacían en la sala y molestaban, para pasar a prestarle atención a la pelí y luego a disfrutarla.

De no ser por el final, el cual cae un poco y Roland no puede evitar de ser típico y abarcador, la película es excelente.
Cabe aclarar, que si no es en el cine, esta película dificilmente pueda ser disfrutada y valorada.

Por todo esto, digo, que no es una peli pochoclera mas...Roland, finalmente esta a la altura de lo que promete.
Son 9 Caramelos para el amigo Roland y 2012.
(¿Guardamos el 10 para Avatar no?)


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